Consejo #1: Para obtener más sabor y jugo, mezcle ligeramente la carne molida. ¡no trabaje demasiado!
Consejo #2: Use una cuchara o una taza medidora para obtener un tamaño uniforme.
Consejo #3: ¡Prepara albóndigas con anticipación y congélalas para múltiples comidas!
Consejo #4: ¡Recaliente en diferentes salsas para diferentes sabores y platos!

Recalentar en salsa para pasta para:
Espaguetis y albóndigas clásicos
Sándwiches de albóndigas
Albóndigas sobre polenta cremosa

Recalentar en salsa para:
Albóndigas sobre puré de patatas
Un sub caliente de albóndigas cubierto con giardiniera

Recalentar en salsa BBQ para:
Sándwich de albóndigas a la barbacoa
Albóndigas BBQ con macarrones con queso